El rizoma de Jengibre es un excelente antiinflamatorio y analgésico natural, frente a dolencias musculares y articulares. Cuando realizamos actividades físicas o deportivas intensas, especialmente si no estamos acostumbrados, podemos resentirnos y padecer la aparición de dolores o inflamaciones. Esto nos obligará a parar durante un tiempo. Si esta situación se repite con cierta frecuencia esto supone interrumpir la dinámica de la actividad deportiva. Para muchos puede resultar desalentador y acabar minando la moral y haciéndoles abandonar la buena costumbre de practicar ejercicio cada día.
Con frecuencia se suele recurrir a los fármacos analgésicos o antiinflamatorios. Sin embargo su consumo habitual no es recomendable para el organismo. Siempre que se pueda es mejor optar por productos naturales, como el Jengibre o la Cúrcuma. Incorporados a nuestra alimentación diaria, nos ayudan a aliviar y prevenir estas situaciones frecuentes en la mayoría de los atletas, y pueden contribuir a mejorar nuestra condición física.
Jengibre, la raíz milagrosa
El jengibre o Kion (Zingiber officinale) es una planta de la familia de las Zingiberáceas. Aunque es originario del sudoeste asiático, más concretamente de China y parte de India, puede crecer en casi cualquier clima tropical. Es conocido con el vocablo chino “Jiang”, que significa “defender”, está demostrado que defiende el cuerpo de la humedad y el frío. Su sabor picante y un aroma penetrante hacen que sea una raíz muy potente, que actúa como antiinflamatorio natural y ayuda a combatir las enfermedades respiratorias.
Posee un intenso color amarillo, con un sabor picante y un aroma penetrante, que le convierten en un interesante condimento. Además del uso culinario, el jengibre es muy apreciado por su uso farmacéutico y en la medicina natural. Por sus numerosos beneficios para la salud, desde hace miles de años se ha considerado como una “raíz milagrosa”. También se emplea como componente de diversos productos para la higiene dental.
A continuación vamos a ver sus numerosas propiedades y cómo consumirlo.
Propiedades y beneficios del Jengibre
Como decimos, el jengibre tiene una gran variedad de propiedades beneficiosas para la salud. Desde antiguo se ha venido utilizando para combatir enfermedades del sistema digestivo, aliviar dolores articulares, proteger el hígado, ayudar al sistema inmunológico, etc.
Expectorante
El jengibre es utilizado para aliviar los síntomas de gripe, resfriados comunes, asma y todos aquellos problemas derivados del sistema respiratorio. Por ello tomar una infusión de jengibre cuando estamos resfriados nos reportará un gran alivio.
Potenciador de la actividad muscular
Esto se debe a su alto contenido en minerales como el potasio, magnesio, calcio y fósforo, que participan en la contracción muscular y en la transmisión del impulso nervioso. Ayuda a prevenir espasmos musculares, calambres y debilidad muscular.
Aumenta el nivel de testosterona
Consumido a diario fresco o en extracto, el jengibre aumenta la presencia de testosterona en sangre. Esto es muy beneficioso para el deportista porque contribuye a aumentar la masa muscular.
Evita las náuseas y los vómitos
El jengibre es eficaz contra las náuseas y mareos provocados por distintas causas.
Antiinflamatorio y analgésico
La presencia de Gingeroles le otorga al jengibre propiedades antiinflamatorias. Además puede aliviar el dolor de cabeza en caso de padecer migrañas. El jengibre bloquea los efectos de la prostaglandina, que causa inflamación en los vasos sanguíneos del cerebro y origina las migrañas (según un estudio de la Univ. de Arizona en 2007). También reduce los dolores de tipo articular en personas que padecen artritis reumatoide, y es eficaz ante el dolor muscular producido por el ejercicio intenso. Además alivia los dolores garganta, las anginas y los dolores estomacales.
Anticancerígeno y Antimicrobiano
Los Gingeroles pueden inhibir el crecimiento de las células cancerígenas previniendo el cáncer, como muestran diversos estudios, tales como el cáncer de ovario. El jengibre es un antibiótico natural que combate enfermedades infecciosas provocadas por diversas bacterias como la Escherichia coli, Proteus vulgaris, Salmonella typhimurium, Staphylococcus aureus y Streptococcus viridans.
Protector Gastrointestinal
Favorece la digestión, facilitando la metabolización de las proteínas. Estimula al páncreas y la producción de enzimas, acelerando el metabolismo. Protege el estómago de la aparición de úlceras gástricas y alivia los síntomas de las existentes. Además previene la flatulencia y la acidez. Es muy eficaz para mantener la flora intestinal y combatir la diarrea.
Otras Propiedades Beneficiosas
El jengibre posee también otras muchas propiedades interesantes:
- Reduce los niveles de estrés por su contenido en Cineol. El jengibre puede ayudar a procurar una sensación de calma, ayudar a disminuir la ansiedad y que nuestro cuerpo se mantenga algo más relajado.
- Mejora la circulación sanguínea, previene problemas cardiovasculares, disminuye el colesterol y ayuda a controlar la tensión sanguínea elevada.
- Antioxidantes, es muy eficaz para luchar contra el envejecimiento celular.
- El jengibre mejora la salud capilar, nutre y da brillo al cabello y elimina la caspa. Mezcla jengibre rallado o seco con aceite y aplícalo con suaves masajes sobre el cuero cabelludo.
- Tiene propiedades afrodisíacas, aumentando la líbido y el deseo sexual.
Cómo tomar Jengibre
La raíz del jengibre se utiliza habitualmente como condimento en la cocina en numerosos platos. Enriquece alimentos que no tienen de por sí un sabor intenso, tales como sopas, arroces, pescado, verduras, frutas, ensaladas, etc.
También puede utilizarse para preparar infusiones de jengibre, añadiéndose al agua caliente bien en rodajas o bien en polvo.
El jengibre puede emplearse en forma de cataplasma para la congestión pulmonar, dolores de articulaciones, etc, colocándose sobre la zona afectada. También se puede elaborar aceite de jengibre para ser aplicado sobre la piel.
Cómo hacer infusión de Jengibre
Esta forma de consumirlo es muy indicada para problemas que afectan al sistema respiratorio y al digestivo, procesos gripales o inflamatorios, así como para las náuseas y vómitos.
- Calentar unos 250 ml de agua en un recipiente y retirarlo antes de que hierva.
- A continuación añadir el jengibre:
- Rizoma fresco: una o dos rodajas (2-3 g/taza) según tamaño del rizoma.
- Jengibre en polvo: 1 cucharadita de café (2-3 g/taza).
- También se puede rallar la raíz fresca y exprimir el jugo directamente en el agua.
- Se puede acompañar con limón natural y un trozo de canela.
- Si se desea se puede endulzar con estevia o miel ecológica.
- Tapar y dejar reposar 8-10 minutos antes de tomar.
Cómo hacer cataplasmas de Jengibre
Aplicar cataplasmas de jengibre es muy interesante para aliviar el dolor e inflamación articular. Para prepararlo hay que seguir los siguientes pasos:
- Calentar agua en un recipiente hasta su punto de ebullición, a continuación retiramos del fuego
- Rallamos la raíz de jengibre
- Introducimos la ralladura dentro del agua caliente la dejamos reposar de 4 a 5 minutos.
- Empapamos una venda o toalla pequeña en el agua.
- Colocamos la toalla humedecida con la solución anterior (procurar que no esté muy caliente y para no quemarnos la piel)
- Dejamos actuar durante 30 a 40 minutos sobre la zona dolorida o inflamada.
- Aplicar este remedio durante varios días hasta que desaparezcan los síntomas.
Dosificación y Precauciones
La dosis diaria de 4 gramos de rizoma de jengibre se considera segura para su uso en adultos y niños mayores de 2 años. Esto equivale a un trozo de rizoma fresco del tamaño de una avellana. El equivalente en polvo serían aproximadamente 2 gramos.
Se recomienda consumir en cantidades o porciones pequeñas, con moderación y siempre acompañada de otros alimentos. Puede causar irritación en caso de padecer ampollas, úlceras o llagas en la boca.
Aunque su como condimento es generalmente seguro, conviene consultar con un médico antes de usarlo como remedio natural, especialmente si estás tomando algún medicamento. Puede interactuar con algunos medicamentos e interferir con la habilidad del cuerpo para formar coágulos de sangre.
No es recomendable el consumo de Jengibre durante el embarazo o la lactancia, ni en niños menores de 2 años, o en caso de estar tomando medicamentos anticoagulantes. Si padeces de cálculos biliares su consumo puede tener efectos negativos. Bajo ningún concepto ingerir aceite de jengibre debido a su alta concentración, que puede resultar muy irritante para el estómago.
En caso de dudas sobre si es adecuado el consumo de jengibre lo más recomendable es consultar con el médico.
Espero que este artículo te haya resultado interesante y te animo a que introduzcas el Jengibre en tu alimentación para beneficiarte de sus propiedades y efectos beneficiosos para la salud.
Un saludo y hasta la próxima.
Buen aporte sigue asi….
Hola Jorge. Muchas gracias por el comentario.
Espero que me sigas también en el canal de Youtube donde estoy subiendo videos muy interesantes. Un saludo
Hola Jorge. Gracias por tu amable comentario.
Un saludo